domingo, 30 de enero de 2011

Octubre 31/09

En esta maldita insatisfacción, este sabor a nada, esta búsqueda de no sé qué, esta ansiedad y padecimiento que de verdad, no sé si valga la pena vivir. No se disfruta de nada nunca. Pocas, muy pocas cosas me satisfacen, nada me llena. No soy buena para nada, pero me gustaría serlo para muchas cosas. Las personas son tan planas, tan iguales, tan predecibles todas. Con sus ideas de vivir para trabajar y así: conseguir cosas para un “futuro” “feliz” (vacío…). Eso, para mí, no está mal; solo que no es mi ideal de futuro. En dónde queda entonces lo importante?¿ En dónde queda el crecimiento espiritual, el conocimiento de las cosas y la vida, el cultivar el intelecto, la familia, los amigos?¿ A caso la equivocada soy yo?¿ Cómo hacer para acabar esta maldita agonía que está estancada en mi pecho?¿ A caso este trastorno no se irá nunca?¿ El amor es el motorcito que mueve a cada persona, el amor al trabajo, a los hijos, a la familia, al dinero, a la pareja, bien. Qué es lo que yo amo?¿ Qué amor es el que hace que todas las mañana yo me levante y siga?¿ Quisiera saberlo para agarrarme a él; hasta hace un tiempo, pensaba que era Francisco, pero no. Más bien yo deseaba que él lo fuera, pero ya me di cuenta de que no es así. También pienso que es mi madre, pero me da miedo, porque mi maldito extremismo me hace sufrir por eso. Entonces con lo anterior me contradigo. Es tal vez, que me da miedo amar porque amar para mí, lo es TODO. Es apostar a ganar o perder todo en el intento, ya perdí una vez y no me gustó, pero ash, ahora pienso: “Qué carájos, hay que seguir apostando”. Francisco no fue, bah… él se lo pierde, espero que el que sea, valga la pena!!!


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